La evaluación. La finalidad de esta es proporcionar una visión de todo el proceso educativo para permitir tomar decisiones con el objetivo de mejorarlo.
Como parte de los procesos de enseñanza-aprendizaje, la evaluación debe servir para detectar problemas, informar y establecer correctivos que les permitan a sus actores desempeñarse de forma cada vez más satisfactoria.
La evaluación debe ser global, es decir aportar una visión del proceso educativo en su conjunto.
Debe tener carácter integral, en su triple sentido: desde la personalidad de los logros de aprendizaje, de sus procesos y de la perspectiva de los factores intervinientes en ellos.
Debe ser de carácter continuo, teniendo lugar en todos los procesos educativos y adquiriendo diferentes formas. Al comienzo su carácter será diagnóstico, durante el proceso, permitiendo obtener informaciones previas sobre las características iniciales de los actores del proceso educativo y de los contextos socioeconómicos y socioculturales de los cuales provienen, para incorporar las mismas en la programación del proceso de enseñanza y aprendizaje.
Será formativa, facilitando determinar progresivamente los aprendizajes de los estudiantes y las estudiantes sobre hechos, conceptos, procedimientos, valores, actitudes y normas necesarias para participar con éxito en el proceso educativo y el consiguiente desarrollo cognitivo, emocional y social.
Sumativa, al concluir el proceso. Estos momentos de la evaluación se consideran sólo para hacer operativa esta tarea.
Debe ser participativa y cooperativa. Esto es hacer intervenir a todos los sujetos de los procesos educativos, alternando momentos en los que cada uno utilice su perspectiva, y momentos donde se combinen las perspectivas de varios de ellos. En consecuencia se deben prever momentos de heteroevaluación, a cargo exclusivamente de los maestros (as), la autoevaluación, en los cuales cada actor pondera sus propias prácticas y resultados, y de coevaluación, donde juntos todos los sujetos aportan elementos, informaciones y criterios para la evaluación del grupo y de los logros alcanzados.
Debe ser considerada como una propuesta de investigación para los educadores, pues pasa a ser un desafío constante a su capacidad para la observación y el análisis.
Debe estar planificada, pero en el marco de esa planificación debe ser flexible, ya que el aprendizaje significativo, es distinto para cada estudiante y la evaluación debe tomar en cuenta las particularidades de cada sujeto y de cada grupo humano. Fuente: Tomo I: Fundamentos del Currículo. Y la Ordenanza 1´96 de educación.
Técnicas o instrumentos de evaluación. Para la evaluación del rendimiento de los estudiantes del nivel básico se tomarán en cuenta:
Los trabajos individuales.
La participación en los trabajos en equipos.
La participación en actividades de aprendizaje cooperativo.
Las actitudes y destrezas para el trabajo.
Los resultados de prueba y
La elaboración de carpetas o portafolios.
Sentido de la Evaluación. Al evaluar, es necesario partir de las mismas preguntas que orientan los procesos de aprendizajes: ¿para qué evaluar?, ¿cómo evaluar?
El para qué evaluar, se refiere a los propósitos. Busca obtener las informaciones significativas sobre el curso que van llevando los procesos de enseñanza aprendizaje, con sus logros y dificultades. La evaluación capacita al estudiante para conocer sus posibilidades y límites, conformando una autoimagen realista de sí mismo y estableciendo metas que le permitan crecer en su efectividad.
¿Qué se evalúa? En primer lugar, se evalúan los conocimientos previos de los alumnos y las alumnas, también, los contenidos, entendidos como hechos, conceptos que se han incorporado, procedimientos, maneras o estrategias de saber hacer.
¿Cómo se evalúa? El estudiante, los profesores y los padres, han de tener claridad, sobre los propósitos y logros, el modo cómo los irán realizando y los límites o dificultades que irán encontrando para el logro de tales propósitos. Fuente: Plan Decenal de Educación en Acción, Transformación Curricular en Marcha. Nivel Básico.
Los criterios de evaluación pueden ser muy amplios y variados, por tal razón la evaluación se sugiere como el seguimiento puntual que se le debe hacer al proceso de desarrollo de cada alumno. Un proceso que involucre todos los aspectos formativos del niño.
Debe incluir la valoración de la formación teórica alcanzada, la valoración de las habilidades y destrezas desarrolladas por los alumnos y en general, debe incluir todos los tópicos de formación del niño como personas pensantes y creativas.
Uno de los objetivos de la evaluación, es el brindar asistencia a los individuos en su proceso de aprendizaje, ayudándole a identificar sus propias fortalezas y debilidades, así como sus dificultades de aprendizaje, de forma que logre mejorar sus áreas deficientes.
La evaluación no debe ser simplemente puesta, debe compartirse con la persona que está siendo evaluada, de tal forma que aquella comprenda claramente por qué y cómo está siendo evaluada.
Aspectos a considerar al evaluar.
¿Qué pretende usted que los niños (as) aprendan?
¿Cuáles son sus metas de aprendizaje para una tarea, actividad o proyecto?
¿Qué actividades y experiencias contendrá el plan de estudios para promover dichas metas?
¿Qué variedad de estilos de aprendizaje utilizará?
¿Cómo comunicará dicha información a los alumnos (as), y a los padres y madres?
Aspectos a considerar al desarrollar políticas y prácticas de evaluación.
¿Comparte usted y sus colegas profesores una opinión acerca de lo que significa ser apto en su área?
¿Qué piensa hacer para que los alumnos (as) comprendan lo que se espera de ellos y cuáles son los logros más importantes?
¿Qué piensa utilizar como evidencia de aprendizaje y cómo piensa interpretarla?
¿Qué tipo de actividad corresponde mejor a determinado tipo de evaluación?
¿Cuándo y cómo serna registradas las evaluaciones?
¿Cómo compartir con los alumnos (as) sus logros como parte del proceso de aprendizaje? Fuente: Educación en Tecnología, por Ángel Alonso Soto Sarmiento.
Desde mi punto de vista, entiendo que la evaluación del docente debe ser un proceso que proporcione una visión clara de todo el ámbito educativo. El profesor es un artista, un experto que analiza y crea sobre una realidad. Es un experto que evalúa situaciones cargadas de significados y como tal, él debe ser evaluado constantemente para determinar cuales son sus fortalezas y sus debilidades. Una efectiva evaluación al docente, es garantía de futuro, de estímulo, de motivaciones, que se le valore su trabajo, que sea incentivado para que cada día sea más efectivo en el desempeño de sus labores.
En conclusión, los profesores deberían disponer de una medida de su propia eficiencia en el cumplimiento del rol docente; es decir, dada la jerarquía de las funciones que desempeña es una responsabilidad que les compete en primera instancia. Por lo que sería aconsejable que en sus informes temporales incluyera informaciones basadas en su propia actuación, ya que debe ser un guardián permanente del proceso educativo.
Como parte de los procesos de enseñanza-aprendizaje, la evaluación debe servir para detectar problemas, informar y establecer correctivos que les permitan a sus actores desempeñarse de forma cada vez más satisfactoria.
La evaluación debe ser global, es decir aportar una visión del proceso educativo en su conjunto.
Debe tener carácter integral, en su triple sentido: desde la personalidad de los logros de aprendizaje, de sus procesos y de la perspectiva de los factores intervinientes en ellos.
Debe ser de carácter continuo, teniendo lugar en todos los procesos educativos y adquiriendo diferentes formas. Al comienzo su carácter será diagnóstico, durante el proceso, permitiendo obtener informaciones previas sobre las características iniciales de los actores del proceso educativo y de los contextos socioeconómicos y socioculturales de los cuales provienen, para incorporar las mismas en la programación del proceso de enseñanza y aprendizaje.
Será formativa, facilitando determinar progresivamente los aprendizajes de los estudiantes y las estudiantes sobre hechos, conceptos, procedimientos, valores, actitudes y normas necesarias para participar con éxito en el proceso educativo y el consiguiente desarrollo cognitivo, emocional y social.
Sumativa, al concluir el proceso. Estos momentos de la evaluación se consideran sólo para hacer operativa esta tarea.
Debe ser participativa y cooperativa. Esto es hacer intervenir a todos los sujetos de los procesos educativos, alternando momentos en los que cada uno utilice su perspectiva, y momentos donde se combinen las perspectivas de varios de ellos. En consecuencia se deben prever momentos de heteroevaluación, a cargo exclusivamente de los maestros (as), la autoevaluación, en los cuales cada actor pondera sus propias prácticas y resultados, y de coevaluación, donde juntos todos los sujetos aportan elementos, informaciones y criterios para la evaluación del grupo y de los logros alcanzados.
Debe ser considerada como una propuesta de investigación para los educadores, pues pasa a ser un desafío constante a su capacidad para la observación y el análisis.
Debe estar planificada, pero en el marco de esa planificación debe ser flexible, ya que el aprendizaje significativo, es distinto para cada estudiante y la evaluación debe tomar en cuenta las particularidades de cada sujeto y de cada grupo humano. Fuente: Tomo I: Fundamentos del Currículo. Y la Ordenanza 1´96 de educación.
Técnicas o instrumentos de evaluación. Para la evaluación del rendimiento de los estudiantes del nivel básico se tomarán en cuenta:
Los trabajos individuales.
La participación en los trabajos en equipos.
La participación en actividades de aprendizaje cooperativo.
Las actitudes y destrezas para el trabajo.
Los resultados de prueba y
La elaboración de carpetas o portafolios.
Sentido de la Evaluación. Al evaluar, es necesario partir de las mismas preguntas que orientan los procesos de aprendizajes: ¿para qué evaluar?, ¿cómo evaluar?
El para qué evaluar, se refiere a los propósitos. Busca obtener las informaciones significativas sobre el curso que van llevando los procesos de enseñanza aprendizaje, con sus logros y dificultades. La evaluación capacita al estudiante para conocer sus posibilidades y límites, conformando una autoimagen realista de sí mismo y estableciendo metas que le permitan crecer en su efectividad.
¿Qué se evalúa? En primer lugar, se evalúan los conocimientos previos de los alumnos y las alumnas, también, los contenidos, entendidos como hechos, conceptos que se han incorporado, procedimientos, maneras o estrategias de saber hacer.
¿Cómo se evalúa? El estudiante, los profesores y los padres, han de tener claridad, sobre los propósitos y logros, el modo cómo los irán realizando y los límites o dificultades que irán encontrando para el logro de tales propósitos. Fuente: Plan Decenal de Educación en Acción, Transformación Curricular en Marcha. Nivel Básico.
Los criterios de evaluación pueden ser muy amplios y variados, por tal razón la evaluación se sugiere como el seguimiento puntual que se le debe hacer al proceso de desarrollo de cada alumno. Un proceso que involucre todos los aspectos formativos del niño.
Debe incluir la valoración de la formación teórica alcanzada, la valoración de las habilidades y destrezas desarrolladas por los alumnos y en general, debe incluir todos los tópicos de formación del niño como personas pensantes y creativas.
Uno de los objetivos de la evaluación, es el brindar asistencia a los individuos en su proceso de aprendizaje, ayudándole a identificar sus propias fortalezas y debilidades, así como sus dificultades de aprendizaje, de forma que logre mejorar sus áreas deficientes.
La evaluación no debe ser simplemente puesta, debe compartirse con la persona que está siendo evaluada, de tal forma que aquella comprenda claramente por qué y cómo está siendo evaluada.
Aspectos a considerar al evaluar.
¿Qué pretende usted que los niños (as) aprendan?
¿Cuáles son sus metas de aprendizaje para una tarea, actividad o proyecto?
¿Qué actividades y experiencias contendrá el plan de estudios para promover dichas metas?
¿Qué variedad de estilos de aprendizaje utilizará?
¿Cómo comunicará dicha información a los alumnos (as), y a los padres y madres?
Aspectos a considerar al desarrollar políticas y prácticas de evaluación.
¿Comparte usted y sus colegas profesores una opinión acerca de lo que significa ser apto en su área?
¿Qué piensa hacer para que los alumnos (as) comprendan lo que se espera de ellos y cuáles son los logros más importantes?
¿Qué piensa utilizar como evidencia de aprendizaje y cómo piensa interpretarla?
¿Qué tipo de actividad corresponde mejor a determinado tipo de evaluación?
¿Cuándo y cómo serna registradas las evaluaciones?
¿Cómo compartir con los alumnos (as) sus logros como parte del proceso de aprendizaje? Fuente: Educación en Tecnología, por Ángel Alonso Soto Sarmiento.
Desde mi punto de vista, entiendo que la evaluación del docente debe ser un proceso que proporcione una visión clara de todo el ámbito educativo. El profesor es un artista, un experto que analiza y crea sobre una realidad. Es un experto que evalúa situaciones cargadas de significados y como tal, él debe ser evaluado constantemente para determinar cuales son sus fortalezas y sus debilidades. Una efectiva evaluación al docente, es garantía de futuro, de estímulo, de motivaciones, que se le valore su trabajo, que sea incentivado para que cada día sea más efectivo en el desempeño de sus labores.
En conclusión, los profesores deberían disponer de una medida de su propia eficiencia en el cumplimiento del rol docente; es decir, dada la jerarquía de las funciones que desempeña es una responsabilidad que les compete en primera instancia. Por lo que sería aconsejable que en sus informes temporales incluyera informaciones basadas en su propia actuación, ya que debe ser un guardián permanente del proceso educativo.
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